Al ver los orfanatos de hace 50 años donde los niños eran más un número que personas, nos hemos comprometido a hacer hogares más personales de 7 u 8 personas cada uno.

Yo creo que con trabajo y cuando uno cree en lo que hace. Yo sigo creyendo en lo que hago. Lo peor es cuando uno no cree en sí mismo, en lo que hace.

Uno se siente pequeño y grande, porque esto es trabajo de un equipo de más de 3.900 trabajadores en nómina y Seguridad Social fijos y el 98% mujeres. Es un trabajo de equipo.

Sí hay muchas desigualdades, especialmente en África y Oriente. Entre comunidades, País Vasco y Cataluña trabajan bien, al igual que Madrid. Me duele que la cueva de la Santina, en Asturias, mi tierra, no tenga accesibilidad.

A algo impensable después de 50 años que es ver cómo la gente, a veces, pierden su casa, no pueden pagar la luz, o incluso, no pueden comer las 4 veces al día, o incluso 1.

Estuvimos en el Salvador, en Haití, en Filipinas, llevando ayuda humanitaria y después creando hogares o colegios que siguen allí ya de forma permanente.

Depende del voluntario, del horario que desee hacer...Los hay que colaboran día a día, mensualmente y el trabajo es bien de servir a los comedores o de apoyo escolar o acompañar a mayores...

Sobre todo en los países de Sudamérica, El Salvador o Irak prestamos ayuda al colectivo de personas con discapacidad, cuidando de niños o familias enfermas, trayéndolos a España...

Fue un disco que hemos grabado en el que queríamos llevar un mensaje de paz al mundo entero.

La llegada de un niño que se llama José...El doctor Cavadas lo revivió...

Sí, hay más desigualdades, siempre hubo ricos y pobres, lo que han desaparecido son izquierdas y derechas...

Sí, totalmente. Pero no tiene mérito porque lo llevan en el corazón y saben bien lo que es ser solidario.

Más la atención social, fundamentalmente.

Uno, ya a mi edad, y los hombres más o menos normales saben que los premios se aprecian pero si uno mira alrededor los merece mucha más gente como nosotros, porque hay mucha gente y algunos héroes/heroínas (como todas las madres).

Por desigualdades sociales, destacan Haití y África....Por lo contrario, España.

Querer, poder y saber.

Llegamos al terreno en avión, sin pensarlo... ayudando al que lo necesita. Hay que estar cerca de quienes lo necesitan...

Entrando en la página web de Mensajeros de la Paz, por ejemplo. Y ahí hay posibilidades.

Sí, nos olvidamos mucho y les despreciamos...En lugar de comer en el lugar principal de la mesa, a veces, comen en un banco en la cocina.

Como la hemos tenido siempre...la crisis no nos afecta especialmente, cuando uno vive en crisis continua y problemas está acostumbrado...

En honor a la verdad, España es un país privilegiado. Damos ejemplo a muchos países, aunque últimamente haya habido recortes....

No, se apadrinan proyectos, no niños...

Asistencia, apoyo y sobre todo facilitar su inserción laboral....